¡Hola! Soy Ignacia
Mi historia pastelera empezó cuando era pequeña y pasaba todos los veranos en la confitería familiar “Moreno Luis” (en Villamartín, Cádiz). Me encantaba, así que con el tiempo lo convertí en mi profesión.
Elegí el nombre de Escorza por ser el apellido de mi madre y de mi abuela materna. Mujeres fuertes, emprendedoras y optimistas, que me inspiran cada día.
Con el tiempo, llegó la “complicación”. Por temas de salud, tuve que dejar el gluten y los lácteos, lo que me obligó a reorganizar toda mi alimentación. Probé diferentes opciones, pero no terminaba de encontrar los sabores que buscaba. Además de no tener gluten, quería que no resultaran muy pesados y que fueran naturales, sin químicos.
Así que decidí cambiar también mi trabajo y hacer yo misma las tartas y panes que quería comer. Porque mi desayuno es sagrado, y comer sin gluten puede ser también comer bien y rico ☺.
Para ello uso harinas sin gluten ecológicas, ingredientes naturales y, siempre que puedo, de pequeños artesanos. Y nada de lactosa. Es más, la mayoría de nuestros dulces no llevan lácteos.
En esta aventura me acompañan (y ayudan) muchas personas. Pero destaco el trabajo en tienda de Itziar, y el de Zohal en cocina.
Hacemos manualmente cada elaboración, con mucho mimo y cariño, así que espero que las disfrutes tanto como nosotras.
¡Gracias!

Imagen de la confitería Moreno en 1927 (fundada en 1890). En la foto, mis tatarabuelos, sus 4 hijos y sus colaboradores.

En la foto mi abuelo Luis con su hermano Juan, atendiendo en la confitería familiar (eran la tercera generación de pasteleros en nuestra familia). De él viene mi pasión por el dulce.

Hemos sido reposteros desde que tengo memoria. Aquí vemos a mi abuelo Luis y a mi hermano, en la puerta del obrador familiar en Villamartín (Cádiz). La foto es de mediados de los 80.

Mi abuela María Escorza con mi abuelo Diego y sus hijas. Mi madre es la cumpleañera feliz. Estas dos mujeres son las que ponen el nombre a este bonito proyecto ❤.
